3 de febrero de 2009

Animales de Compañia y Ancianos

Las ventajas de adquirir una mascota son múltiples: ternura, cariño, compañía, amistad, etc. Su presencia en nuestro hogar convierte el espacio en un lugar alegre y acogedor. Además, estas virtudes se ven acrecentadas cuando la soledad llega a nuestra vida en la senectud. En estos momentos es cuando el hecho de contar con un amigo que nos transmita afecto se convierte en una necesidad básica.

En el caso de una persona de edad avanzada, la posible aparición de la temida melancolía, ya sea por la viudedad o por la imposibilidad de ser cuidados por su familia, puede hacerse más llevadera con una mascota en el hogar. Disfrutar a diario de un perro o un gato le ayudará a seguir adelante de una manera mucho más optimista y saludable.

Fructíferas investigacionesLas investigaciones que se han llevado a cabo en el campo de los animales de compañía han sido muy fértiles. Un ejemplo de ello es el conjunto de estudios realizados por la Fundación Affinity, que ha conseguido grandes avances en los conocimientos sobre las ventajas que aporta una mascota a algunos sectores de la población como ancianos, discapacitados o presos.

Para la Fundación, una persona mayor puede beneficiarse de la compañía de los animales, siempre y cuando ésta tenga muy claro que no sólo lo desea, sino que también puede hacerlo. Desde el año 1992 financian los costes de la adopción a personas jubiladas y han costeado los estudios de la Universidad de Baleares y de la de Barcelona que confirman los beneficios de la tenencia de animales por los mayores.

Notables mejoríasLa mayoría de las personas muestran una actitud positiva a través de su relación con una mascota. Las observaciones efectuadas hasta el momento demuestran que se pueden conseguir importantes mejoras en problemas de tipo psicológico y físico gracias al apoyo de un animal doméstico.

Mayor movilidad, más amigos, menos medicinas y un aumento de la sensación de bienestar son algunos de los aspectos positivos que aportan a la gente mayor. El hecho de cuidar de un animal, manteniendo la cabeza ocupada, es otra gran virtud de nuestro amigo. Además, debemos pensar en lo agradable que puede ser para una persona que se ha quedado sola contar con un pequeño compañero en casa que le haga la vida más alegre y le haga olvidar sus penas.

Terapias con animalesPara la gente mayor, la convivencia con un animal puede transmitir mucha vitalidad; incluso llegan a vivir más tiempo y con mayor calidad. El hecho de tener la responsabilidad de dar de comer a su mascota, llevarlo al veterinario, cuidar su aspecto físico, etc. supone realizar más ejercicio y, por tanto, la consecuente mejora de su salud. Igualmente, acariciar al animal, sentir sus mimos y su necesidad de cuidados, son grandes puntos a favor del uso de animales en el tratamiento contra la depresión.

En algunos países se tienen animales en los hogares geriátricos como parte de la terapia con los mayores. Sin embargo, no debemos olvidar que este método no debe aplicarse aislado, sino que es complementario de los cuidados que el anciano necesita de los expertos médicos.
Grandes beneficiosExisten muchas razones por las que un anciano puede sentirse triste. En la mayoría de las ocasiones, perder a su pareja y tener que afrontar la vida en soledad, le impide sentirse satisfecho. Asimismo, la disminución de actividades por estar enfermo o por no sentirse arropado por su gente, pueden afligirle mucho, una situación que ha crecido más de lo que pensamos en los últimos años.

Sin embargo, existen medios para paliar este sentimiento. La mayoría de las personas no conoce las enormes excelencias que producen las mascotas sobre ellos mismos. Un perro o un gato son los mejores compañeros para cualquiera de nosotros, pero más aún cuando se llega a la tercera edad.

Entretenimiento, relajación y equilibrio emocional son algunos de los beneficios demostrados. Incluso, varias pesquisas han evidenciado que aumentan y mejoran la vida en enfermos cardíacos. Por tanto, nada mejor que un buen y leal amigo para combatir los pesares al llegar la vejez.

Los Animales Reducen el Riesgo de padecer ALERGIAS

Aquellas personas que comparten su entorno con un animal poseen una vida mucho más saludable en numerosos aspectos. Igualmente, los bebés que durante la lactancia han estado en contacto directo con animales domésticos, desarrollarán en su organismo defensas contra diversas bacterias.


Ciertos estudios confirman que los niños que se crían con un animal de compañia tienen menos riesgo de desarrollar determinadas alergias o enfermedades, tales como el asma.

Las investigaciones llaman la atención sobre las endotoxinas, componentes de las bacterias que abundan en todos los hogares en los que habita un perro o un gato. Los pequeños que crecen en un ambiente con estas bacterias desarrollan una mayor inmunidad y menor sensibilidad a las mismas, llegando incluso a reducir de forma considerable las posibilidades de padecer alergias a lo largo de su vida.

Bacterias y animales: efecto protector

Una investigación publicada por el Journal of the American Medical Association, realizó un seguimiento a 474 bebés sanos, desde su nacimiento hasta los siete años. De ellos, 184 compartieron su infancia con animales de compañía y 220 no tuvieron contacto con sus animales de compañia.

Una vez concluido el análisis, se descubrió que los niños que vivían con perros o gatos tenían un 50% menos de probabilidades de desarrollar enfermedades alérgicas, en comparación con los que no convivieron con animal alguno. Además, el informe demostró que los niños del primer grupo, al estar más sanos, asistieron a clase una media de 18 días más que sus compañeros sin mascota. Asimismo, los bebés que crecen próximos a una granja presentan un menor índice de afecciones que los que no se ven expuestos a las bacterias que trasmiten los animales de rancho
Efectos positivos de tener un animal de compañía.

Tener un animal de compañía es positivo y aporta beneficios a la salud humana: existe un menor riesgo de sufrir ataques al corazón y otras enfermedades cardiovasculares, desciende la demanda de servicios médicos y se produce una mejoría física y psicológica en las personas de la tercera edad. Sin embargo, aunque no existe una evidencia definitiva para reafirmar lo dicho, las estadísticas demuestran que los “dueños” de animales son menos propensos a desarrollar alergias y otras dolencias.

Expertos en el tema indican que los niños que habitan con animales crean un código comunicacional mutuo a través de las expresiones, el olor, los gestos, etc., es decir, se comunican. Por esta razón, los más pequeños de la casa se sienten fascinados por los animales: crean fuertes lazos afectivos, aprenden a respetar y muestran ternura y cuidado hacia su animal de compñia. En este sentido, cuando tu hijo se haga adulto se convertirá en una persona con capacidad para amar y cuidar al prójimo.

Futuras terapias

Uno de los métodos más prometedores que se estudia para intentar aplacar esta hipersensibilidad es el de someter a los niños desde una edad muy temprana a las bacterias que van a influenciar en su sistema inmunitario. Por ejemplo, una familia que quiera tener en casa un animal de compañía, estará exponiendo desde el principio a su bebé a los numerosos microbios que desprende su nuevo amigo.
El objetivo de esta exposición es forzar las defensas inmunitarias del bebé para que desarrollen un espacio protector. El fin del método es frenar la reacción alérgica y contribuir a un organismo más saludable preparado para adaptarse al entorno.

No le abandones

Aunque los niños que han tenido contacto con animales durante los primeros años de vida padecen menos patologías, también es cierto que existe el caso contrario. Los casos de alergia producidos por animales van en aumento: las proteínas del pelo, la saliva o la orina pueden producir una reacción que produzca síntomas como la rinoconjutivitis, dermatitis o problemas de las vías respiratorias de tu retoño o de cualquier otro miembro de tu familia.

La alergia es una respuesta exagerada de nuestro organismo cuando entra en contacto con determinadas sustancias. El sistema inmunitario encuentra en una partícula de polvo, polen, pelo de gato o de perro, por ejemplo, cuerpos extraños y peligrosos. Nuestro cuerpo reacciona contra esos agentes extraños produciendo una serie de anticuerpos que actúan como autodefensa. Cada vez son más los especialistas que atribuyen la aparición de estos trastornos, a una excesiva higiene en nuestra vida cotidiana que hace que nuestro sistema inmunológico se vuelva más vulnerable ante cualquier alérgeno.

Algunos “dueños”, amparándose en esta contingencia, deciden abandonar a su animal de compañía por miedo a que se agraven las reacciones tras la aparición de los primeros síntomas. Antes de dejar a tu fiel amigo a su suerte, MundoPatitas te recomienda que te informes sobre los efectos que puede provocar esa alergia, ya que quizá no se desarrolle de forma severa.
A través de simples medidas de prevención, tales como lavar semanalmente al animal con un producto especial o seleccionar vacunas específicas para los diferentes tipos de alergia, siempre bajo prescripción médica, conseguirás que tu salud mejore y además, no tendrás que deshacerte de tu mejor amigo ya que él, nunca lo haría.

Reportajes recomendados:


Fuente: http://www.misanimales.com/mascotas/guiasapoyo/?pagina=masco

Beneficios de Tener un Animal de Compañia en Casa

Los animales de compañía están considerados como una medicina preventiva. Su cuidado y el afecto hacia ellos promueven la salud y prolongan la vida. Numerosos estudios han demostrado, por ejemplo, que cuando los acariciamos la tensión arterial se reduce, además de producir efectos relajantes en nuestro organismo. Y es que, sin duda, ellos son un verdadero antídoto contra el estrés y una fuente inagotable de amor y compañía.

Estos son algunos de los beneficios que aporta la convivencia con una animal de compañía.

  • Disminuyen el sentimiento de soledad: su presencia constante hace que las personas se sientan más confiadas, seguras y protegidas. Su compañía también estimula el contacto físico y la comunicación; casi todos los dueños le hablan a su mascota y la conversación resulta más relajante debido a una sencilla razón: los animales no juzgan a las personas.
  • Incrementan la autoestima: los cuidados y atenciones que demandan las animales de compañía reducen los tiempos de ocio, hacen que la persona se sienta útil y generan una estrecha relación entre humano y animal, en la que ambos intercambian cariño y emociones. Son una constante fuente de motivación para su dueño.
  • Los niños aprenden: la convivencia con las animales de compañía contribuye a que los niños aprendan valores positivos como el respeto hacia los animales y la vida, la amistad y el amor, crea sentido de responsabilidad y promueve la comunicación entre padres e hijos. Las animales de compañía pueden enseñar a los niños a amar. Una animal de compañía desarrolla en el niño la sensación de ser siempre aceptado y querido.
  • Mejoran el humor: ellas son una fuente de alegría y diversión para toda la familia, y con su compañía nos enseñan a disfrutar de las cosas sencillas de la vida.
  • Estimulan el contacto social: tener una animal de compañía es una buena manera de establecer contactos sociales más positivos, conociendo a otras personas con quienes compartir anécdotas y experiencias sobre ella, ampliando así el círculo de amistades.
  • Ayudan a estar en forma: los perros necesitan caminar y hacer ejercicio diariamente. Compartir con la mascota y disfrutar de esta actividad hace que tanto ella como su dueño se mantengan saludables.
  • Favorecen la recuperación de las enfermedades: se ha demostrado que aquellas personas que poseen animales de compañía se recuperan más rápido de enfermedades como infartos y de cirugías, que aquellas que no las poseen.
  • Apoyan a personas discapacitadas: particularmente los perros, pueden convertirse en los ojos, los oídos y las piernas de muchas personas que padecen ciertos impedimentos físicos.
  • Nos hacen más humanos: los cuidados y el amor hacia los animales nos hacen demostrar mayor empatía y actitudes positivas hacia ellos, y así aprendemos a actuar de la misma manera con las personas.
  • Liberan del estrés: los estudios llevados a cabo sobre personas que poseen animales de compañía y otras que no tienen, muestran que el primer grupo tiene estados de ánimo más altos y periodos menores de depresión.

Fuente:Perros Aragoneses

Terapia asistida por animales, la mejor medicina

¿Qué pensarías si tu médico te recomendara tener un animal de compañia?
Los animales pueden aportar beneficios físicos y psicológicos en el tratamiento de numerosas enfermedades. Son muchos los estudios que se han realizado sobre esta materia, pero es ahora cuando comienza a extenderse su aplicación real.

Corría el año 1953 cuando el psiquiatra Boris M. Levinson descansaba en su despacho con su perro Jingles junto a él. Un paciente del doctor se presentó muy nervioso antes de la cita. Se trataba de una madre con su niño, que acusaba gran retraimiento y aquella tarde estaba muy alterado. El perro del Dr. Levinson se acercó al niño, llamado Johnny, y comenzó a jugar con él. El psiquiatra tuvo la brillante idea de incluir a Jingles en el tratamiento para comprobar si esta terapia ayudaba a la rehabilitación de Johnny.

Dos disciplinas diferentes
Lo que comenzó como un ensayo fruto de la casualidad, ha terminado constituyendo dos prácticas muy eficientes que hoy en día se conocen como Actividad Asistida por Animales (A.A.A.) y Terapia Asistida por Animales (T.A.A.). El primero de estos programas propone encuentros o visitas en las que se incorpora y juega un papel básico el animal. Se trata de algo espontáneo y no regulado, es decir, que el terapeuta puede ser perfectamente un voluntario no profesional y, por lo tanto, no se registran los avances y no existen objetivos concretos. Los entornos en los que se desarrolla una A.A.A. pueden ser de lo más variopinto y no son específicos.

La T.A.A. es algo mucho más serio y ordenado. Se plantean una serie de objetivos y metas para la recuperación de un paciente que, por norma general, no ha mejorado con la medicina tradicional. Así pues, los progresos dentro de esta terapia se van recogiendo para el estudio, el establecimiento de valores en la evolución y el diagnóstico. Éstos son algunos rasgos por los que se diferencian ambos tratamientos y porque la persona que controla el proceso es un fisioterapeuta o un psicólogo, es decir, alguien cualificado.

Beneficios de la interacción
La profesionalidad de estas técnicas exige un grado de preparación en los animales muy alto. Por eso, se les selecciona y entrena a conciencia tras cumplir con éxito pruebas de salud, habilidad y aptitud. Las sesiones se establecen de tal forma que se pueda extraer de las mismas algo positivo, ya sea la relajación del paciente, el hecho de que éste hable, demuestre su cariño y sus debilidades, se haga más fuerte, olvide sus problemas de salud, etc.
Los fines que se persiguen con esta terapia van desde los beneficios físicos y mentales hasta los educativos y emotivos. Por ejemplo, físicamente, se persigue mejorar tanto las habilidades en el manejo de una silla de ruedas como las cualidades motoras en general. En cuanto a las mejoras psíquicas se pueden conseguir interacciones verbales, desarrollar la autoestima, paliar la soledad y la ansiedad o fomentar la atención.

Además de todos estos logros, también se pueden alcanzar sentimientos deseables como la empatía, la socialización y la aceptación. La mente se estimula e, incluso, se puede llegar a estabilizar el metabolismo. Pero no sólo las mascotas convencionales pueden ser utilizadas para lograr efectos terapéuticos. Si bien el perro es un animal asombroso por su capacidad de aprendizaje, obediencia, fidelidad y amor incondicional que profesa, hoy en día existen alternativas terapéuticas como la Hipoterapia (Terapia Asistida por Caballos) y la Delfinoterapia (Terapia Asistida por Delfines).

Principales obstáculos
Está comprobado que los animales son de gran ayuda para el ser humano, pero a veces la intención no es lo único que cuenta. Puede darse el caso de que al enfermo no le favorezcan en absoluto este tipo de técnicas, bien porque se obsesiona con el animal, porque no confíe en las expectativas de curación o, simplemente, porque resulte alérgico.

En el caso del terapeuta, puede ocurrir que no estén bien orientado o formado. La institución tiene la responsabilidad legal en caso de accidente. Además, debe disponer de un espacio adecuado, controlar los ruidos y las condiciones de salubridad. Muchas veces estas organizaciones acaban antes de empezar debido a todas estas cortapisas. Por supuesto, un animal dedicado a esto puede llegar a sufrir mucho, por eso es necesario que sea controlado por un veterinario.

Los Querubines

Los Querubines
Cuenta la leyenda que en el cielo hay un grupo de angeles traviesos, Los querubines, quienes son los soldados que cuidan a nuestros bebes peludos, son sus angeles guardianes,...para mi son aquellos que guiaron a la Negra de regreso a San Joaquin cruzando Avenida la Florida y Americo Vespucio, sin ningun rasguño, son quienes salvaron la vida de Blankita haciendo que el Punzon no traspasara las costillas solo causandole heridas leves....son quienes trajeron a mi vida a Candy, Canito, y a todos los miembros de lo que yo llamo Mi Manada...

Gracias