3 de abril de 2008

Signos clínicos y formas de presentación

En la evaluación del paciente con TVT, como en cualquier neoplasia, es importante comprobar el estado general mediante examen clínico y métodos diagnósticos complementarios. La Estadificación es el procedimiento médico que permite al veterinario cuantificar la extensión del compromiso tumoral en el paciente. Esto involucra determinar las lesiones propias del tumor primario (T), extensión a nódulos linfáticos (N), la extensión del tumor comprometiendo órganos a distancia (M), la identificación de las condiciones secundarias, que necesitan ser tratadas o controladas antes de instituir la terapia decidida y la identificación de síndromes paraneoplásicos: anorexia, caquexia, fiebre y alteraciones hematológicas, que además pueden ocurrir como efecto secundario del tratamiento quimioterápico.

En varios estudios realizados en el TVT, sobre aspectos de la respuesta orgánica local, regional y general, se puede concluir que: Dentro de los signos clínicos observados, el 100% de los casos de TVT genital presenta al momento de la consulta, descarga sanguinolenta o hemorrágica desde la vulva o pene, observándose una masa tumoral localizada y de gran extensión, o múltiples nódulos irregulares ricamente irrigados. En general, debido a los hábitos de aseo del perro, que acostumbra lamer sus heridas y secreciones, es difícil detectar en forma precoz los signos de perdida sanguinolenta prepucial o vaginal, siendo percibido sólo cuando la hemorragia supera la capacidad del perro de lamerse, o cuando la magnitud de la masa produce deformación externa.


En los TVT orales y también en los nasales, la sangre o secreción es tragada enmascarando su presencia como manifestación temprana, siendo la deformación el primer signo visible, que debe ser evaluado radiológicamente para evidenciar presencia de lesiones óseas. En la ubicación nasal, la epistaxis también constituye un signo que en algunas ocasiones se manifiesta en forma intermitente. Hemos observado casos en los cuales en un primer periodo de descarga nasal la citología es negativa, ha cesado la epistaxis por un tiempo, y solo al reaparecer el síntoma por segunda o tercera vez, evidencia la presencia de células en el examen citológico.

En la hembra es frecuente que se confunda su presencia con un celo prolongado, y cuando la hembra queda preñada las primeras evidencias pueden aparecer posteriores al parto, dando la impresión de que su crecimiento se detiene durante el periodo de gestación.

El TVT puede adoptar diversas formas, lesiones nodulares, pedunculadas, sésiles o multilobuladas, bien irrigadas, solitarias o profusamente distribuidas en la superficie mucosa, conformando masas sangrantes y friables, que desprenden con facilidad segmentos de tejido transplantable. En el macho puede comprometer toda la extensión del pene, siendo más complejo de exteriorizar cuando se ubica en la base y cuando se extiende su crecimiento comprometiendo la pared prepucial particularmente en el fondo del estuche. Los tumores de más riesgo para muestrear son los que se ubican en el glande. En la hembra pueden comprometer vulva y vestíbulo, y extenderse a la vagina, el cuerpo y los cuernos. El aumento del volumen tumoral, puede protruir a través de los labios vulvares o del ostium prepucial; puede invadir zonas anátomicas vecinas, como son la piel perivulvar y la cubierta prepucial y evolucionar con ulceración, necrosis e infección

Aunque muchas veces el tumor venéreo se presenta de gran tamaño, sólo en algunos pacientes (20%), produce ulceración de la piel en la zona de los genitales.

El TVT nasal puede extenderse por continuidad a la cavidad oral, invadiendo el paladar tanto duro como blando, siendo posible observarlo en su forma característica al examen clínico de la cavidad oral. Algo similar puede ocurrir por invasión de la zona lateral de vestíbulo, entre la cara interna de labios y las encías, y hacia el margen gingival de algún alveolo dental. Al expandirse en dirección orbital, puede fistulizar en la zona lacrimal.


Ubicaciones menos frecuentes del TVT son la epidermis, en forma de un crecimiento papilar típico, rojizo y sangrante, o como nódulos subcutáneos, generalizados, con o sin ulceración. Si se tiene en consideración el mecanismo de transmisión de esta entidad, la forma multifocal sería el resultado de un proceso metastásico generalizado. También se ha encontrado en la mucosa anal, en la conjuntiva ocular, en la mucosa oral, en las amigdalas, en el hígado, el bazo y la pared abdominal.

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Los Querubines

Los Querubines
Cuenta la leyenda que en el cielo hay un grupo de angeles traviesos, Los querubines, quienes son los soldados que cuidan a nuestros bebes peludos, son sus angeles guardianes,...para mi son aquellos que guiaron a la Negra de regreso a San Joaquin cruzando Avenida la Florida y Americo Vespucio, sin ningun rasguño, son quienes salvaron la vida de Blankita haciendo que el Punzon no traspasara las costillas solo causandole heridas leves....son quienes trajeron a mi vida a Candy, Canito, y a todos los miembros de lo que yo llamo Mi Manada...

Gracias